Los muchos lectores de Benedetti no se pondrán de acuerdo en qué texto prefieren, en estos días difíciles, para recordar al autor uruguayo. Habrá quien recite que en la calle codo a codo somos mucho más que dos, quien hable del corazón coraza, de los hombres que encuentran su tregua y la pierden, de los que marcan geografías para que otros no olviden la memoria dolorida del Cono Sur. Será difícil que se pongan de acuerdo porque Benedetti ha escrito un obra inmensa y múltiple, construida a lo largo de seis décadas y en todos los géneros –narrativa, poesía, ensayo, teatro, canción y artículo de prensa–, porque su voz pelea contra la rutina, el desencanto, las injusticias o el desamor, porque su capacidad para despertar esa “conspiración de entusiasmo” que una vez nombró Hugo Alfaro lo dejará a salvo del olvido, y porque su defensa de la alegría como una trinchera y un destino merece ser rezada en voz baja para así conjurar la muerte y derrotarla, no sólo de las ausencias transitorias sino también, como para todos nosotros ya sin Benedetti desde el domingo 17 de mayo, de las definitivas.
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Mª Ángeles Pérez López

Profesora de Poesía Latinoamericana

Máster en Estudios Latinoamericanos

 

La imagen corresponde a la entrega del VIII Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana del año 1999 que concede la Universidad de Salamanca junto con Patrimonio Nacional.

 

La Facultad de Filologia Homenajea a Benedetti (más información en el PDF adjunto)